El portavoz de Iniciativa Porteña, Manuel González Sánchez, afirma sentirse «indignado» por el destino de la parte de los beneficios de la empresa Aguas de Sagunto, que le corresponden al Ayuntamiento. Recuerda el líder de IP que el ingreso de esos beneficios en las arcas municipales estaba paralizado desde 2016, pero se ha producido un cambio en la Intervención municipal y han encontrado la fórmula para ingresar ese concepto desde 2016. Esa cantidad asciende a 950.000 euros, «casi un millón de euros, que le han sido sustraídos a los vecinos en el recibo del agua, se ha insertado en el presupuesto municipal».
IP en un documento entregado a la Delegada de Hacienda dentro del proceso iniciado para la negociación del presupuesto, expresaba como una de sus condiciones para aprobar las cuentas de 2020, que se destinara este beneficio a reducir el precio del agua, mediante el pago del canon del agua desde el presupuesto, «pero para nuestra sorpresa, en la respuesta del equipo de gobierno a nuestras peticiones, no se hace referencia a este beneficio y muchísimo menos recogen nuestras pretensiones. Recordemos que el canon del agua, de 12,4 millones de euros, fue ingresado en las arcas municipales, pero se está pagando como un préstamo a 25 años desde el recibo del agua, algo que nos parece inasumible, cuando, además, se le está cargando a todos los vecinos el beneficio que extrae la empresa privada y, lo más grave, el ayuntamiento de Sagunto»
Las delegaciones de EU sacan su tajada
Más adelante, el portavoz de IP, Manuel González, ha expresado su malestar ante EU, «que dicen estar en contra de la empresa mixta, pero en sus delegaciones sacan provecho del dinero sustraído a los vecinos en el recibo del agua. Concretamente Guillermo Sampedro obtiene 44.000 euros para Juventud, mientras Rovira ha conseguido su parte del botín, 32000 euros para playas. Una parte de ese dinero, 200.000 van a cursillos del plan EDUSI».
Señalar por último que, desde Iniciativa Porteña se preguntan que «pensarán los vecinos de nuestro municipio, cuando vean que lo que pagan por el agua potable, un servicio básico, se destina a cursillos, fiestas de juventud y a las playas… hay mucho cabreo vecinal con este asunto y con acciones como la perpetrada por el gobierno municipal, ese cabreo está más que justificado».